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sábado, 3 de noviembre de 2012

Rosquillas de la abuela

La receta es del blog como-nubes-a-mi-te.blogspot.com., aunque le he hecho algunos cambios... me cuesta mucho hacer una receta siguiendo todos los pasos al 100%.

La cosa es que nos encantan las rosquillas, pero nunca me había dado por hacerlas... pero viendo la pinta tan buena que tenían, me animé. Y, ni punto de comparación con las compradas, buenísimas.

Ingredientes:

*Cascaremos un huevo por el extremo más fino, para sacarlo y poder usar la cáscara para tomar la medida de algunos ingredientes. Os recomiendo que lo hagáis con una cucharita.*

- 2 huevos
- 4 medidas de huevo de fructosa (azúcar en la original)
- 4 medidas de huevo de aceite de oliva
- 3 medidas de huevo de leche
- 1 medida de huevo de anís del mono (1/2 medida en la original)
- 700 gramos de harina de repostería (750 gramos en la original)
- 1 cucharadita de bicarbonato
- Aceite para freír
- 1 cucharada de canela (canela al gusto, para espolvorear, en la original)
- Fructosa para espolvorear (azúcar en la original)


Preparación:

1)- Con una cucharita, cascamos un huevo por el extremo más fino, lo justo para vaciarlo y usar la cáscara para tomar las medidas de algunos de los ingredientes.


2)- Mezclamos los huevos con la fructosa y el aceite, hasta que estén bien ligados.


3)- Mezclamos la leche y el anís del mono.


4)- Mezclamos el bicarbonato y la canela.


5)- Vamos añadiendo la harina, cucharada a cucharada, y sin dejar de remover. No añadimos la siguiente cucharada, hasta que no esté totalmente integrada la anterior. Así, hasta que ya no admita más harina. Debe quedarnos una masa manejable, pero un poco húmeda.


6)- Formamos una bola con la masa, la tapamos con un paño y la dejamos reposar 10 minutos. Al formar la bola, es posible que se nos pegue la masa a las manos, por lo que para ello nos las enharinaremos previamente. Una vez reposada, ya no se pegara tanto.


7)- Ponemos aceite a calentar (mejor en una sartén pequeña) y vamos formando las primeras rosquillas. Para ello, cogemos un pegote de masa y, tal como si fuera plastilina, entre las palmas de las manos, le daremos forma alargada. Luego, no hay más que juntar los extremos. Vamos echando las rosquillas, según las vayamos formando.


8)- Según las vayamos sacando, las dejamos escurrir sobre papel absorbente.


9)- Servimos espolvoreadas con fructosa.

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